Resourceful 39

Firecita is almost forty! Y no lo puedo creer! 

Se van a reír porque sueno como doña, pero de verdad, verdad... no me siento tan vieja!  😅

En estos días recibí una invitación a un cumpleaños cuyo código de acceso fue la palabra del año de la festajada. Cuando vi la invitación pensé en que nunca se me había ocurrido tener una palabra del año y pasé los días siguiente pensando en ello. si tuviera una, cual sería la mía? Por qué? 

Uno de mis libros favoritos de 2024 (no es que se publicara en ese año, sino que en ese año lo leí) fue The Book of Charlie, y creo que entre mis favoritos de este año estará A Pair of Wings, si algo tienen en común los protagonistas de ambas historias es que eran resourceful y esa cualidad les ayudó a buscar siempre la vuelta a las situaciones difíciles de su vida, a salir bien, a estar bien. A estas alturas estoy convencida de que la vida nunca será lo que espero, de que la estabilidad es una utopía y de que quizás el verdadero éxito está en buscar la manera de estar bien no matter what. He decidido que mi palabra, del año y de la vida es resourceful. Para enfrentar lo que sea y siempre buscarle la vuelta, aprender lo que tenga que aprender para estar bien y agregar valor a la vida de los demás, porque siempre hay alternativas and it's all about the decisions we make.

Entiendo que mi vida no es más especial que la del resto. Tiene cosas buenas, muchos momentos que atesoro y por los que estoy agradecida, pero también tiene sus complicaciones y mucha incertidumbre, algo que nos mantiene a todos humildes porque somos hijos del destino.

La vida es eso que cuando crees que está estable... se pone de cabeza! Recibo mis 39 de cabeza, como la vida, pero contenta. Muy contenta! 

Después de casi dos años sola, estaba convencida de que me gustaba mi vida tal y como estaba. No tenía la más mínima disposición de que nadie me examine como si fuera artículo de ferretería, no quería ir a conocer la familia de nadie (que también te analiza con mirada que juzga) y mi paciencia para andar en citas en Tinder o Bumble no ha existido nunca. Así que estaba abrazando y disfrutando mi soltería como un estado de vida permanente. 

Ya era mucha estabilidad, pasz y, no lo voy a negar, un poco de aburrimiento, así que la vida decidió divertirse conmigo. Leí un libro que me puso a reflexionar sobre mi antigua relación sentimental, sobre lo inmaduros que fuimos los dos, lo rápido que fui a divorciarme y una conversación de cierre que nunca tuvimos. Decidí revisar los mensajes que me había enviado mi exesposo después que se fue, y que nunca leí. Los leí, pensé, escuché mi ego, dejé de escucharlo y respondí. Una respuesta que tardé días en escribir, y luego en enviar, pero lo hice. 

Mi respuesta desencadenó una serie de conversaciones extensas, profundas, honestas... que nos llevaron a la reconciliación (porque tampoco les voy a hacer el cuento muy largo, para más detalles, se toman un café conmigo 😉). Un proceso tranquilo, más fruto de una decisión que de una necesidad, porque ambos nos sentíamos bien en nuestra vida de solteros, ambos teníamos planes de futuro que no incluían al otro, pero extrañábamos lo mejor del tiempo en que estuvimos juntos al mismo tiempo que, por lo menos yo, temía que volviera a repetirse lo peor. 

You gotta choose your hard! Y en este caso es hacer el trabajo que requiere no caer en el abismo que acabó con el nosotros. Asumir el compromiso de elegirnos sin papeles, hablar con la intención de comunicar, ser, estar, disfrutar. 

Todavía estoy receteando el cerebro, pero el salto de fe lo di cuando decidí responder, cuando me senté a hablar, cuando decidí creer de nuevo. 

Una cosa buena de cumplir años, es que nos damos permiso de pedir deseos, así que utilizaré este espacio para poner nombre a los míos. Deseo más mañanas tranquilas, tomando té y leyendo en la galería de mi casa. Proyectos interesantes, de esos a los que no sabes cuantas horas les has invertido porque los haces por pasión y no para cubrir requisitos, esos en los que dejas un pedazo de ti y donde tu mayor recompensa es verlos sobrevivir en el tiempo. Deseo salud para seguir metiéndome en líos interesantes y días, muchos días para seguir poniendo a mis amigos a madrugar para ver las salidas de en la playa, para subir montañas y bañarnos en ríos, para hacer tonterías y ser feliz, para cuidar y que me cuiden, querer y que me quieran.

Este será mi último año en la fase de ensayo de la vida, porque el cuento empieza a los 40, todo lo anterior fue un ensayo... And I can't wait! 

¡Gracias por celebrar conmigo!