Como si las imperfecciones fueran un pecado, todos en estos días queremos
ser perfectos. A penas saliendo de la
adolescencia, vamos corriendo al ortodoncista a colocarnos brakets para lucir
una sonrisa digna de anuncio de pasta dental,
nos matamos con dietas y ejercicios para lucir el cuerpo de una top
model (en mis días del colegio, un regalo de
graduación era una joya o algo así, ahora las niñas están pidiendo
liposucción y tratamientos con láser),
luego empezamos con las cremas “Anti Age” en los catálogos de
cosméticos… y cuando las cremas no funcionan,
le damos la bienvenida al bisturí, bótox etc. Así es como de repente te
encuentras con la foto de un conocido en una revista que en vez de pasar de la
vida adulta a la vejez, pasó de ser adulto a convertirse en “una cosa” (se han
estirado tanto que parecen “una cosa”).
Todo, por obsesionarse con ser perfecto.
Querido Dios: Ayúdame a aceptar el paso del tiempo con dignidad… Amén!
En estos días leí una nota que hablaba de asimetría, trataba el asunto
desde el punto de vista de la moda
(cortes de pelo, blusas, vestidos, peinados… la asimetría está de moda!) pero
terminaba enfocando el tema desde una perspectiva más humana, somos
seres asimétricos. Los dedos de nuestras manos, la forma en que nos crece el
pelo, incluso nuestro lado derecho es
diferente al lado izquierdo. La imperfección que viene de la asimetría nos hace
bellos.
Si hace dos fotos de su lado derecho o
de su lado izquierdo y trata de unirlas para formar un rostro, verá
aparecer ante sus ojos un ser extraño. Se imagina una persona con los dedos del
mismo largo? O el mundo siendo un lugar
tan perfecto que todos pensamos y actuamos del mismo modo? Mejor ni lo imaginamos, en los primeros casos
sería una criatura anormal, el ultimo convertiría la aventura de vivir en una
existencia monótona y aburrida. Prefiero la asimetría; el encanto, la belleza y las sorpresas que
trae consigo.
Para mí, la asimetría es perfección, pero para quienes lo perfecto fue, es
y siempre será una línea recta, entonces les diré que la imperfección es
simplemente maravillosa.
“tanto nadar para morir en la orilla” a veces es lo que pasa con nosotros y
nuestros razonamientos. Licenciaturas, diplomados, maestrías, doctorados y no terminamos de entender que en este mundo
nadie vive una vida perfecta, peor aún, nos empeñamos en aparentar que la
nuestra lo es.
Mentiras, represiones, cirugías, secretos, sacrificios, hairbrushing, todo
para ocultar lo que somos y/o representar algo que simplemente no existe.
Mentiras repetidas hasta convertirse en una “verdad” que no hace más que
generar frustración, represión de lo que la naturaleza grita por no ir en
contra de lo que es “moralmente correcto”, cirugías para negar la identidad
racial o esconder las consecuencias de nuestros propios excesos, sacrificios para disfrutar de un estatus que
no podemos mantener, hairbrushing para
vender un sueño de perfección que ni las modelos más cuidadas poseen … A eso
llamamos perfección? Lamentablemente así
lo concibe un gran número de personas en nuestros días, algo a lo que me
resisto, pero con lo que inevitablemente
tengo que convivir.
A veces no nos toca la vida que deseamos, pero solo cuando dejemos de
obsesionarnos con ser personas perfectas que viven una vida perfecta,
encontraremos la manera de hacer algo maravilloso con la realidad asimétrica
que nos ha tocado vivir. Personajes como Bill Gates y Steve Jobs son muestra de
la magia que puede hacer la creatividad ante el “fracaso”, estrellas como Michael Jackson nos muestran en lo que nos podemos convertir
si nos obsesionamos con una perfección que no existe.
Habrá altas y bajas, buenas y malas, quien piense igual a ti y quien rechace
tus criterios. Esas diferencias nos hacen especiales, nos impulsan a crear, a
mejorar y hacen de la vida una maravillosa aventura.
Críticas y comentarios son bienvenidos,
Hasta la próxima!
"Habrá altas y bajas, buenas y malas, quien piense igual a ti y quien rechace tus criterios. Esas diferencias nos hacen especiales, nos impulsan a crear, a mejorar y hacen de la vida una maravillosa aventura."
ResponderEliminarNo hay mucho que comentar, concuerdo contigo, la imperfección del ser humano y del mundo hacen que valga la pena vivir, que sea valioso vivir.
Gracias por escribir, un abrazo.
Gracias por leer la nota y por tu comentario :) Saludos afectuosos desde República Dominicana!
Eliminar